Un resultado satisfactorio u óptimo en una operación de nariz sin cirugía devolverá al paciente su armonía facial. Uno de los objetivos primordiales de este tipo de medicina estética es que no se aprecie el tratamiento. Si dicho tratamiento cumple a este nivel y se integra perfectamente y de forma natural con la fisonomía general de la cara, además de corregir cualquier tipo de malformación, el resultado será plenamente óptimo y armónico.

Si bien la rinomodelación puede obtener muy buenos resultados en algunos casos, hay situaciones en las que la única forma de modificar el aspecto de la nariz es la cirugía. La rinomodelación o rinoplastia sin cirugía es un tratamiento de medicina estética donde no se va a corregir ninguna alteración funcional sino tan solo las deformidades puramente estéticas sin necesidad de pasar por quirófano ni una ardua recuperación.

Mediante la rinomodelación se logran reparar desviaciones del perfil del dorso de la nariz, pequeñas gibas, atenuar el puente de la nariz y elevar la punta de la misma. En cambio, mediante la rinoplastia u operación de nariz se corrigen las malformaciones congénitas, aquellas que pueden producir algunas secuelas localizadas en el paladar o el labio y también pueden existir otro tipo de factores (traumatismos), causados tras haber sufrido algún accidente o enfermedades, además de las causas puramente genéticas y/o estéticas.

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La rinomodelación consiste en la aplicación de pequeñas infiltraciones de productos biocompatibles que se realizan en zonas estratégicas previamente identificadas.

Para el tratamiento del dorso de la nariz se utilizan diferentes materiales de relleno como el ácido hialurónico o la hidroxiapatita cálcica. En determinadas ocasiones, cuando la punta de la nariz se baja al sonreír o simplemente al hablar, se requiere el empleo de otros materiales conjuntamente con el ácido hialurónico si fuese necesario. Mediante dicha combinación se pueden remodelar los ángulos nasolabiales y rinofrontales a fin de obtener una mayor armonía con el resto de la estructura facial.
Cabe mencionar que muchas veces suele ser necesaria la corrección del mentón junto con la rinomodelación con tal de armonizar la globalidad del perfil facial.

El tratamiento de rinomodelación que aplica el Dr. Fabio Vieira muestra resultados inmediatos en tan solo 30 minutos. Según el caso de cada paciente se requerirá de una o más sesiones a fin de obtener unos resultados naturales y acordes con el resto del rostro del paciente.

Una vez terminadas las sesiones del tratamiento, los resultados obtenidos tienen una duración de aproximadamente de 6 a máximo 12 meses, en función de cada paciente. Pasado este periodo de tiempo, el paciente podrá volver a realizarse el tratamiento de nuevo si quiere mantener sus efectos.

La rinomodelación sin cirugía es un procedimiento de medicina estética no invasiva, por lo que las molestias son mínimas y el paciente puede reincorporarse a su vida cotidiana desde el primer momento.

En casos puntuales cabe la posibilidad de que aparezca un leve enrojecimiento y/o inflamación de la zona tratada que cederá en cuestión de pocos minutos u horas.